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Si quieres pintar un bambú, primero vuélvete un bambú

"Conoce el amor siendo amor, entonces es sabiduría. Puedes ir al Museo Británico y puedes encontrar todo lo que ha sido escrito acerca del amor, puedes escribir una gran tesis acerca del amor pero no habrás conocido nada acerca del amor. No habrás saboreado nada del amor, ni siquiera una gota en tu lengua. Podrás volverte muy, muy sagaz acerca del amor, podrás ser capaz de hablar acerca de él, pero serás incapaz de vivirlo. Y, recuerda, si no eres capaz de vivirlo, no lo conoces...

En el Zen se dice que si quieres pintar un bambú, primero debes ir al bosquecillo de bambúes. Vive con los bambúes en todo tipo de clima: que sea el verano, el invierno y las lluvias, y vive con los bambúes para poder sentir tal como ellos sienten. Cuando está oscuro y la noche es silenciosa y arriba están las estrellas, siente tal como sienten los bambúes. Cuando sale el sol y hay un gran viento y los bambúes se balancean y bailan, siente cómo lo sienten los bambúes. Y cuando está lloviendo y los bambúes se deleitan, deja que ese deleite entre en tu ser.

Si quieres pintar un bambú, primero vuélvete un bambú. A menos que hayas conocido el bambú desde adentro, a menos que te hayas identificado totalmente con el bambú, cualquier cosa que pintes será sólo una fotografía, no una pintura. Esa es la diferencia entre una fotografía y una pintura. Ninguna cámara podrá jamás hacer algo como Van Gogh; ninguna cámara puede hacer eso".

Osho, Unión Mística. El camino sufí
http://osho-maestro.blogspot.com/