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La meditación tiene que ser probada, no debatida

"Y en lo que sea que creas, no te limites a creer; conságralo, hazlo sagrado viviéndolo. No permitas que sólo sea una creencia intelectual en la cabeza: tiene que hacerse existencial. Entonces se consagra, entonces lo has santificado, lo has hecho sagrado.

Las creencias, si sólo son pensamientos, son inútiles. A no ser que se conviertan en tu propia sangre, huesos y médula, a no ser que las vivas... si sientes que algo es verdad, ¡vívelo! Esa será la única prueba de que lo que sientes es verdadero. No hay ninguna otra prueba. Tu vida es la única prueba de tu creencia... Vívela, no desde el exterior hacia el interior, sino justo lo opuesto: desde el interior hacia el exterior. Primero experimenta una verdad.

Por ejemplo: Yo digo que medites. Ahora bien, tú puedes convertirlo en una simple creencia: que es bueno meditar, que la meditación contiene una gran verdad, que ahora puedes debatir con los demás acerca de sus bondades, acerca de los misterios de la meditación. Tú mismo nunca has meditado porque los debates, los pensamientos y la lectura acerca de la meditación no te dejan tiempo. Te has olvidado por completo de que la meditación tiene que ser probada, no debatida.

Es decir, puedes imponerte, violentamente, alguna postura meditativa. Puedes sentarte en silencio como un Buda, aunque por dentro no haya budeidad, silencio, pureza, inocencia. La charla interior continúa, pero en el exterior puedes estar sentado como una estatua de piedra. Eso es hipocresía, simplemente estás fingiendo. Esa no es la forma de consagrar; esa no es la forma de hacer algo sagrado.

Tienes que entrar en meditación de verdad, no que fingir. Porque siempre que vives una verdad, la verdad se consagra".

Osho, Geometría de la conciencia. Enseñanzas místicas de Pitágoras
http://osho-maestro.blogspot.com/