El presente es...la muerte de la mente. Pero la muerte de la mente es el comienzo de la auténtica vida
"Dividimos el tiempo en tres: pasado, presente y futuro. Pero esta división no es correcta. El tiempo sólo consta de presente; la mente consta de pasado y futuro...
La mente es la memoria del pasado y la imaginación del futuro, pero el tiempo es indivisible y presente. Nunca te topas con el ayer y tampoco con el mañana. En realidad, lo que te encuentras siempre es el momento presente...
El presente es sencillamente la muerte de la mente. Pero la muerte de la mente es el comienzo de la auténtica vida. La mente te hace vivir una vida que no es auténtica. Toda tu desesperacion, tu angustia y tu infelicidad son producto de la mente. Cuando el movimiento se detiene, se detiene la mente. De pronto estás aquí y ahora. Por primera vez experimentas la existencia. Por primera vez estás despierto. El sueño de la mente, la mente dormida, ya no está...
Y ahora te empieza a ocurrir otras cosas. Es lo contrario de lo que la mente hacía. En vez de angustia, sientes éxtasis; en vez de infelicidad, una enorme dicha; en vez de desesperación, alivio; en vez de sentir que las cosas no tienen sentido, por primera vez, ves la importancia y la belleza de la gloria con la que te ha obsequiado la existencia. Y sin ningún esfuerzo por tu parte, surge una tremenda necesidad de dar gracias a la totalidad, de estar agradecido, de bailar en agradecimiento, de cantar en agradecimiento".
Osho, No tienes nada que perder. En el camino hacia la verdad, la conciencia y la felicidad
http://osho-maestro.blogspot.com/
La mente es la memoria del pasado y la imaginación del futuro, pero el tiempo es indivisible y presente. Nunca te topas con el ayer y tampoco con el mañana. En realidad, lo que te encuentras siempre es el momento presente...
El presente es sencillamente la muerte de la mente. Pero la muerte de la mente es el comienzo de la auténtica vida. La mente te hace vivir una vida que no es auténtica. Toda tu desesperacion, tu angustia y tu infelicidad son producto de la mente. Cuando el movimiento se detiene, se detiene la mente. De pronto estás aquí y ahora. Por primera vez experimentas la existencia. Por primera vez estás despierto. El sueño de la mente, la mente dormida, ya no está...
Y ahora te empieza a ocurrir otras cosas. Es lo contrario de lo que la mente hacía. En vez de angustia, sientes éxtasis; en vez de infelicidad, una enorme dicha; en vez de desesperación, alivio; en vez de sentir que las cosas no tienen sentido, por primera vez, ves la importancia y la belleza de la gloria con la que te ha obsequiado la existencia. Y sin ningún esfuerzo por tu parte, surge una tremenda necesidad de dar gracias a la totalidad, de estar agradecido, de bailar en agradecimiento, de cantar en agradecimiento".
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